
SailingCuack inicia una nueva temporada y lo hace con nuevos retos y nuevos compromisos en la vela de base, principalmente. También realiza un pequeño esbozo de lo que ha sido 2016, sobre todo para los regatistas que se encuentran bajo su paraguas. En este sentido, su directora Ana Monsalvo, una de las entrenadoras más destacadas de la Comunitat Valenciana, arranca con dicho balance deportivo: “En 2016 nos hemos dado cuenta de que tenemos que dar un paso más en el plano técnico. Estamos buscando fórmulas para trabajar con los clubes a los que pertenecen los regatistas de SailingCuack y con sus técnicos, de manera que se pueda marcar un calendario de tecnificación y entrenamientos durante el año, para en definitiva aumentar el seguimiento de los regatistas y aportar herramientas de trabajo y metodología a las entidades que quieran colaborar con nosotros”, subraya.
Éxitos
Por lo que respecta a los regatistas de SailingCuack, Monsalvo explica la actuación y éxitos conseguidos en el año que se ha marchado: “Ha sido un año bueno para nuestros regatistas, y dentro de lo positivo nos gustaría destacar ese trabajo en la sombra que hacemos con las jóvenes promesas, esos regatistas de la categoría B, a los que muchas veces no se les dedica el cariño suficiente, y que por otro lado son el futuro de nuestra vela”, añadiendo que “en SailingCuack dedicamos una gran parte de nuestros recursos y esfuerzos a que estos regatistas tengan el material, asesoramiento y ayuda técnica necesarios para que cuando pasen a la categoría A tengan el nivel para clasificarse para pruebas nacionales, y si todo sale bien, para europeos y mundiales”.
Satisfacción
En esta línea, la directora de SailingCuack se muestra muy satisfecha del trabajo acumulado, así como de las líneas marcadas desde sus inicios y que son los pilares de Sailing Cuack, en cuanto a las ayudas a los regatistas: “A casi el 100% de nuestros regatistas los hemos acompañado desde su Optimist B hasta categorías superiores como 420, con Carlos y Nacho Balaguer; y Láser 4.7, con Eduardo Ortuño y Jose María Wandosell”.
Autocrítica
Pero todo no ha sido un camino de rosas, como destaca Monsalvo, quien incluso hace autocrítica: “Ha sido un año bueno, aunque si tenemos que destacar algo con el símbolo ‘menos’ quizás tendríamos las dificultades que nos encontramos a la hora de tecnificar a los regatistas, bien sea por la falta de apoyo de las instituciones o por la falta de cultura de deportes náuticos, ya no hay tantas facilidades para practicar la vela como otros deportes”, según explica.
De hecho, SailingCuack, de la mano de la clase AECIO, ha sido pionera a la hora de poner en liza un trofeo muy especial para las competiciones de Optimist, premiando a los mejores equipos con una tarta de golosinas, algo que los más peques esperan conseguir en cada regata. Tras dos años con su trofeo de clubes homónimo, se puede concluir que Sailing Cuack seguirá apoyando esta iniciativa: “Es nuestro segundo año con el ‘Trofeo Clubes’ y la verdad que al principio no las teníamos todas con nosotros. Pero después de las primeras regatas, empezamos a recibir comentarios positivos y los propios regatistas preguntaban al llegar a la regata si el trofeo se iba a entregar. Los técnicos y los propios clubes han visto de una forma muy positiva que se entregue un premio al trabajo en equipo, de esta manera los regatistas que están más arriba ayudan a sus compañeros que no van tan bien en la clasificación para que suban y así el equipo gana el Trofeo”, comenta Monsalvo. La reputada entrenadora también profundiza a la hora de hacer balance de la imagen que ofrece la Vela Infantil y la Vela Ligera: “La Vela Infantil todavía está en niveles aceptables de número de regatistas y nivel pero la vela ligera está en un momento, a mi parecer, bastante bajo”.
Crisis
En este sentido, asevera que “tenemos que tener en cuenta la crisis sufrida en España, que ha hecho que no se navegue tanto”, añadiendo que “sí me gustaría decir que los regatistas en vela infantil encuentran una logística y apoyo muy fuerte por parte de la federación y entidades colaboradoras, pero se siguen perdiendo recursos por el camino. Tampoco hay que olvidar que si hay técnicos y seleccionadores es porque hay regatistas, ya que las regatas son para los niños, no para los adultos”.
Sinceridad
Por lo que respecta a la Vela Ligera, Monsalvo se sincera y se muestra crítica: “En la Vela Ligera todo el apoyo desaparece y el regatista pasa de tenerlo todo organizado a no tener, a veces, incluso quien le inscriba en una regata. El número de barcos cae estrepitosamente y los niños prefieren hacer otras actividades a navegar”. En cuanto al nivel de la flota de la Comunitat Valenciana, Monsalvo también se muestra muy sincera a la hora de hacer un análisis: “En la Comunitat Valenciana no estamos mal, pero no estamos al nivel que deberíamos, ya que sigue habiendo otras comunidades autónomas que copan los nacionales año tras año y de ese nivel no bajan, mientras que nosotros tenemos temporadas buenas y temporadas normales”, incide.
Novedades
Monsalvo se despide desvelando alguna de las novedades de SailingCuack para 2017: “Tenemos un par de proyectos entre manos, a los cuales estamos dando forma, para trabajar con la vela base y para tecnificar a nuestros regatistas, Asimismo, han llegado nuevos regatistas, pero como decíamos antes, los integrantes de SailingCuack empiezan con nosotros desde la categoría B, así que hasta dentro de un par de años no se verán los resultados del trabajo”.